domingo, 7 de febrero de 2016

poema 274

CCLXXIV




Canto a las madres


Querida Madre, hasta el cielo quiero que llegue mi canto
Porque yo te extraño tanto que te busco en mi desvelo;
Te recuerdo como niño, con la amenaza constante:
Decías: -saldrás avante, y me dabas tu cariño;

Entonces no te entendía, sólo buscaba tu abrigo,
Y que estuvieras conmigo era toda mi alegría;
Petición casi imposible éramos tantos hermanos
Y eran numerosas manos que apenas era creíble

Atender tantas demandas de tantos niños traviesos
Todos inquietos y aviesos con oscuras propagandas,
Propias de la inmadurez, de aquella inocente infancia,
Esos años de vagancia y de mucha insensatez;

Pero todos superamos aquellos retos de vida,
Encontramos la salida, con mucho esfuerzo logramos,
Cada uno su destino, cada uno un buen hogar,
Todos logramos formar un muy honesto camino;

Entonces tú te marchaste, nos dejaste en soledad,
Yo descubrí la verdad cuando nos abandonaste;
Hoy recuerdo tu sonrisa, ese afán de progresar
Tú me lograste heredar a más de esfuerzo pericia;

Este diez de mayo quiero reconocer tu labor,
Entregándote mi amor con sentimiento sincero;
Las madres nunca se mueren, viven en el corazón
Hoy les doy esta canción SUS HIJ@S SIEMPRE LAS QUIEREN…


No hay comentarios:

Publicar un comentario