lunes, 19 de septiembre de 2016

poema 1232

MCCXXXII


El vals de las flores



Llegó la rosa presuntuosa,
Su espina camuflajeada,
Llegó el clavel sin una espada
Siempre amante y tras de la rosa;

Llegó el alhelí, nada oscuro,
Con ese aroma y gran blancura,
Llegó la violeta que es pura
Y ese gladiolo firme y seguro;

Llegaron muchísimas flores
Con esa bella primavera,
Se acabó aquella larga espera
Y resurgieron los amores;


Y aquellos por siempre amantes,
Regalaron esas mil flores
A esos sus miles de amores
Que son excelsos y vibrantes;


Llegó aquella Flor de Liz
Que se dice sempiterna,
Y aquella coqueta orquídea
Como gran emperatriz;


Llegó la espiritual magnolia,
El crisantemo supremo,
Ese lirio, siempre tierno,
Y la amapola en su gloria;


Llegaron hermosas flores,
Y con ellas el amor,
Y con ellas el fervor
De muchos tiempos mejores…

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