MMDCCXCVII
Interminable esperanza
Dónde quedaron tus besos,
en la fiebre de mis labios,
así como entre mis manos
las caricias de tu cuerpo;
dónde guardo tus silencios
en el lugar más sagrado
de mi alma y aquel regazo
en mis amados recuerdos;
do quedaron las promesas
de ese amor interminable,
la ilusión de esa entrega,
de un mañana que no acabe
en mi ser todo se queda
como esperanza constante...
Dó quedaron promesas del amor interminable, ilusión de entrega, de mañana que no acabe, en mi ser todo queda: esperanza constante...
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