MMDCCLXVIII
Un dulce sueño de amor
En un sueño inolvidable
pude disfrutar tus besos,
pude acariciar tu cuerpo
y con gran ternura, amarte;
con tu inmensa luz, llenarme,
disfrutar todo momento,
en otro espacio sin tiempo
pidiendo a Dios que no acabe;
sin embargo aquel Edén
al despertar, terminó,
y se esfumó aquel placer
como en triste ocaso, el sol:
mi almohada yo mojé
y suspiré por tu amor...
Aquel Edén, al despertar, terminó, se esfumó aquel placer como en triste ocaso, el sol: mi almohada yo mojé y suspiré por tu amor...
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